
alterar las mareas de la noche;
si pudiera una sonrisa
alejar las sombras sin dar coces.
Nos reiríamos hasta el amanecer
en la larga noche de carcajadas,
atados a las locuras más sobrias
y a los espasmos más endiablados
Y ningún demonio de las lágrimas
a más de un metro se aproximaría,
muerto de miedo de contaminarse
con nuestra viral y repentina alegría.
Libres estaríamos y volaríamos
hacia una plaza cerca del mar,
donde el infinito sonido de las aguas
se confundiría, deliciosamente,
con nuestras carcajadas.
2 comentários:
Mandou!
el proper en català!
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